Sudáfrica - 2015
Este año tengo decidido capturar imágenes del Tiburón Blanco en su habitat natural, he visto varios documentales y he buscado información en internet, que fácil es hoy en día recabar datos por la red y que difícil era cuando viajaba acompañado de un mapa de papel y los folletos que conseguía en los consulados o embajadas.
Uno de los mejores sitios para hacerlo es Sudáfrica, su ubicación donde acaba África y con los Océanos Atlántico y Índico bañando sus costas lo hace la opción más factible para mis planes.
El país también me ofrece otras opciones muy interesantes que visitar, tanto a nivel de fauna, como lugares de alto interés turístico como el parque nacional Kruger, Ciudad del Cabo, cabo de Buena Esperanza o el cabo de Agulhas, (Agujas en castellano), bautizado así por el navegante portugués Bartolomé Díaz en uno de sus viajes para descubrir la ruta hacia el Océano Índico, vio que en ese punto la declinación magnética era nula y que las agujas de las brújulas apuntaban exactamente al norte geográfico, es también el punto más meridional de África y punto de unión de los Océanos Atlántico y Índico.
Según las agencias de viaje y lo que leo en las redes, la opción más normal de visitar el país es en mi caso que viajo solo, alquilar un vehículo e irme desplazando por mi cuenta alojándome en varios sitios. Muy importante es evitar mi paso y visita por Johannesburgo, ya que desde el final del apartheid se ha convertido en una ciudad muy peligrosa, donde la gente de color que vivía en los guetos ha asaltado, desvalijado y ocupado las viviendas ocupadas en su momento por la clase alta del país, mayormente blanca.
La agencia con la que tengo tratos este año me prepara un itinerario donde podré ver lo más interesante de cada zona del país.
El desplazamiento aéreo es largo y la combinación más rápida y asequible es desplazarme desde Barcelona donde resido a Frankfurt (Alemania) para desde allí volar a Johannesburgo, donde cogeré un vuelo local a Hoedspruit, pequeña población local donde recogeré un coche de alquiler y desplazarme al lodge África on Foot ubicado en una reserva privada muy cerca del parque nacional Kruger, el más importante del país.
05-08-2015 - miércoles
Los vuelos transcurren sin incidencias y a mí llegada a Sudáfrica me está esperando un representante de mi agencia en el país para entregarme toda la documentación necesaria y el primero de los dos coches que usare. Mi primera sorpresa llega en el aparcamiento aeroportuario, me entregan una berlina BMW de gama alta, no es lo que yo esperaba, siempre que viajo y reservo un vehículo mi primera demanda es que sea automático, pero no de una categoría muy alta.
El representante me indica que es el único con transmisión automática de que disponen y que no va a tener ningún coste adicional, tras las instrucciones básicas de su funcionamiento me pongo en marcha.
Dispongo de mi móvil y previamente en casa me he descargado la ruta en Google Maps para poder usarla sin consumo de datos, espero que funcione, pues mis conocimientos viarios del país son nulos.
Estas líneas las estoy escribiendo en 2023, han pasado casi ocho años de mi estancia en Sudáfrica, tengo pocos recuerdos del desplazamiento, pero no tuve muchos problemas para llegar, eso sí al abandonar las carreteras asfaltadas y circular por caminos de tierra para acceder al lodge sufrí mucho intentando esquivar las piedras y arbustos muy secos para no dañar la carrocería del BMW.
Al llegar al lodge me encuentro con otro “problema” como se apaga el coche, aparte de automático no va con la clásica llave en el contacto, se enciende con un botón y la cercanía de un mando que tengo, pero ese botón no apaga el encendido y no encuentro el medio, solicito ayuda al personal del lodge y tampoco saben, no recuerdo bien como lo logre, pero lo hice y me quede con el sistema para otros desplazamientos.
El lodge es muy acogedor, decoración típica de la zona con mucho gusto, dispongo de un bungalow individual bien equipado, no deshago mucho el equipaje ya que solo estaré dos días aquí.
He llegado por la mañana y después de poner en orden mi equipaje y comer salimos a realizar mi primer safari por estas tierras.
06-08-2015 - jueves
Los safaris se realizan en vehículos Land Rover y son totalmente descubiertos, los había visto en documentales, pero no los había utilizado nunca en mis anteriores visitas a África, la primera sensación es de indefensión sobre todo si vas en el lado exterior, no hay puertas y tienes todo el cuerpo expuesto si algún animal se acerca.
Lo primero que veo son Antílopes Impala, especie muy frecuente en África y una de las presas habituales de los depredadores, también veo alguna Cebra y Búfalos. Son animales que ya he visto en anteriores viajes y yo, así como los demás integrantes del safari deseamos ver animales más interesantes, ósea los grandes felinos.
Tenemos suerte al acercarnos a una charca divisamos una pequeña manada de Leonas, están tumbadas y muy relajadas, nos acercamos despacio para no ahuyentarlas, no se inmutan y siguen tranquilas están acostumbradas a la presencia humana, se por experiencia de otros safaris que mientras permanezcamos en el interior del vehículo no harán ningún gesto agresivo, eso sí, si nos bajamos pasaremos a ser una presa fácil. La cercanía me permite realizar buenas fotos, de ver en cuando alguna se levanta para hacer sus necesidades o beber agua de la pequeña laguna donde estamos.
Estamos un ratito con ellas lo que me permite observarlas y fotografiarlas con tranquilidad, una de ellas tiene heridas recientes en el rostro, seguro que la captura de alimentos no ha sido fácil, de repente sin preocuparse de nuestra presencia se pone a hacer la croqueta o revolcarse delante nuestro, todo un espectáculo.
Está atardeciendo y por seguridad no podemos seguir en la zona, nos alejamos del lugar y vamos a un lugar tranquilo que me permite disfrutar de un bonito atardecer africano.
La vida en África empieza pronto y eso me gusta, nada más desayunar volvemos a salir para intentar ver el máximo de fauna posible.
Los animales que estoy viendo están en el parque nacional Kruger, yo tengo contratado los safaris, pero si uno circula por libre por el interior del parque no tiene problemas, los sudafricanos lo hacen mucho, eso si los carteles avisan que está totalmente bajarse de los vehículos.
La mañana empieza bien, veo Antílopes Kudu, es una especie muy grande, también hay varias manadas de Búfalos y sin casi darme cuenta estoy delante de varios Rinocerontes Blancos, espectacular animal, veo que los conductores de los vehículos están muy atentos a cualquier movimiento de ellos, son muy impredecibles, sin mediar ningún movimiento agresivo por nuestra parte te pueden embestir sin previo aviso.
Después de fotografiarlos proseguimos ruta, veo Jirafas y más Cebras entre otros animales, regresamos para comer ya que por la tarde volveremos a salir.
La tarde transcurre tranquila, pasamos por un pequeño rio, veo Hipopótamos y algún Cocodrilo, yo estoy intentando divisar algún Leopardo, animal muy difícil de ver, pues es muy solitario y se esconde en la frondosidad de las cúpulas de los árboles con las presas cazadas, no tengo suerte, eso sí en pequeño espacio entre árboles volvemos a ver la manada de Leonas que vi ayer, observo con atención sus movimientos, veo que no todas están durmiendo, hay varias que vigilan con atención cualquier movimiento extraño que se produzca a su alrededor, las horas transcurren con rapidez, sin casi darnos cuenta estamos disfrutando de otro bonito atardecer y regresando a la seguridad del lodge.
07-08-2015 - viernes
Mi estancia en el lodge África on Foot, ha llegado a su fin y después de desayunar me voy en busca de mi próximo destino, es la reserva Sabi Sands y el lodge se llama Umkumbe, esta vez no tengo suerte y el desplazamiento se complica, Google me lía y me lleva por caminos erróneos, no tengo buena cobertura y eso genera imprecisiones con la navegación, retrocedo varias veces el camino andado y pregunto a los lugareños que voy viendo por la reserva, como mis conocimientos de la lengua local son nulos, así como del inglés, me cuesta hacerme entender, la gente es amable e intenta ayudarme, pero me doy cuenta que estoy perdido, me miran con curiosidad, un güiri perdido en un flamante BMW no es muy habitual, permanezco un rato parado a ver si Google Maps se centra un poco y puedo averiguar donde me encuentro, la idea es inútil así que decido ponerme en movimiento intentando volver a tener conexión.
Siempre he pensado que tengo suerte en mis viajes y así es, voy circulando despacio para ver todas las indicaciones y en una bifurcación veo un cartel con el nombre de la reserva que estoy buscando, el camino es de tierra, muy pedregoso y yo con un BMW como si fuera un todoterreno, llevo recorridos varios kilómetros por el sendero y ahora tengo otro problema, voy viendo algún letrero con nombres de lodges, pero ninguno es el mío, el camino es estrecho y entretenido, veo algunas Jirafas y Cebras, pero nada que me cerciore que voy por buen camino. Aparte de la fauna no veo nada más, llevo lo que para mí es una eternidad circulando en solitario con la única compañía de animales, dudo entre dar la vuelta o seguir adelante, cuando ya empiezo a estar seriamente preocupado aparece ante mí un letrero de madera con el nombre lodge Umkumbe, por fin mi perseverancia en el camino ha dado sus frutos.
El lugar es completamente diferente al anterior, mucho más grande y muy cerca de un rio.
El bungalow también es diferente, muy espacioso y con la cama rodeada por una tupida red, igualito que en las películas, tendré que ir con cuidado la cercanía del agua me hace suponer que al atardecer habrá muchos mosquitos.
He llegado justo a la hora de la comida, ideal me relajo con una deliciosa Savanna fresquita, ensalada y fruta.
Que es Savanna, es una deliciosa bebida refrescante de sidra de manzana, muy parecida y similar graduación alcohólica que una cerveza, la descubrí en un viaje anterior que realice por Namibia, Zambia y Botwana y aprovecho mis estancias en África para degustarla, ya que es muy habitual en estas tierras.
Primer safari en esta zona, los vehículos que hay son muy parecidos a los del otro lodge, la fauna que hay también, Rinocerontes Blancos, especie que me había resultado muy difícil de fotografiar otros años y éste me estoy resarciendo con creces, Búfalos, Cebras, Jirafas, no podía faltar al finalizar la jornada de disfrutar de un precioso atardecer.
08-08-2015 - sábado
Me levanto pronto y disfruto de un precioso amanecer, tras desayunar salimos a la caza de animales, nada reseñable, Rinocerontes Blancos, Antílopes Kudu, Cebras y alguna Jirafa, hoy el safari es de día completo, llevamos un picnic muy completo que degustamos al mediodía, vuelvo defraudado, no he visto ningún depredador o lo que es lo mismo Leones, Leopardos y Guepardos, eso sí los atardeceres siguen siendo preciosos.
La tarde me depara una sorpresa vamos a hacer un safari nocturno, será mi primera salida de noche de mis cuatro visitas anteriores a África. Interesante como experiencia, pero a nivel visual casi nula, alguna Hiena un sorprendido Antílope Grysbok, especie que no conocía y muchos ruidos extraños sin poderlos identificar.
09-08-2015 - domingo
Las mañanas son fresquitas, se nota que aquí es invierno, desayuno y me uno al safari diario, hoy van a intentar que veamos Elefantes, especie que todavía no he visto este año, es desplazamiento es largo y nos alejamos bastante de nuestra ubicación, por el camino veo cebras, otra especie de Antílopes que no conocía, los Nyala y varios Antílopes Ñu, escasos por aquí, pero con grandes manadas en Kenia y Tanzania.
A media mañana llegamos a una zona habitada por Elefantes, hay bastantes y dedicados exclusivamente a alimentarse de arbustos, pasamos un par de horas disfrutando de éstos magníficos animales, siempre con mucha precaución ya que no están muy acostumbrados a ser molestados y muestran algún signo de agresividad, el guía en cuanto ve que alguno despliega sus enormes ojeras, detalle evidente de ponerse en guardia e iniciar una posible agresión ordena a los conductores de los vehículos retroceder rápidamente.
De regreso al lodge para comer tenemos suerte y disfrutamos de la visión de un par de Leones durmiendo, nos acercamos con precaución para fotografiarlos y ni se inmutan, levantan brevemente la cabeza para controlar nuestros movimientos y prosiguen con su siesta.
Esta tarde no hay safari, estos días he disfrutado viendo algunos de los grandes animales de África, Leones, Rinocerontes, Elefantes o Búfalos Africanos. pero las posibilidades de ver Leopardos o Guepardos no ha sido posible, ya que son muy esquivos ante la presencia humana.
Mañana abandonare la zona para irme a la costa, ha llegado el momento importante de este viaje, el Tiburón Blanco, eso sí después de cenar disfruto de una buena noche con bailes y canciones tradicionales africanas.
10-08-2015 - lunes
Día de transición, regreso al aeropuerto de Hoedspruit, para devolver el BMW y desplazarme a Ciudad del Cabo en un vuelo local.
En el aeropuerto de Ciudad del Cabo me recibe un agente local y me da las llaves de otro coche que me servirá para desplazarme el resto de mi estancia en el país, esta vez no me entregan un coche espectacular, es un normalito Nissan Almera, automático eso sí, pero sencillito y básico, lástima podría haber sido al revés, con este tengo previsto desplazamientos largos por carreteras asfaltadas y con en BMW casi no hice kilometraje, pues los trayectos fueron muy cortos.
Esta noche tengo reserva en el lodge Whale Rock de Hermanus, ciudad muy popular por ser el centro de salidas al Océano Atlántico para divisar Ballenas.
La distancia desde el aeropuerto es de 120 km. aproximadamente y no presenta en principio dificultades, pero mis planes de utilizar Google Maps con el itinerario que me he descargado con anterioridad falla y se queda colgado muchas veces dándome instrucciones erróneas y fuera de tiempo, es invierno y oscurece rápidamente, voy por una autopista casi desierta muy pendiente de los paneles de señalización para no pasarme mi salida y empiezan a asaltarme las dudas sobre si me habre pasado de largo, no me he fijado al inicio del viaje de los kilómetros que había de inicio y no se los que llevo recorridos, tomo la decisión de parar en algún , área de servicio para preguntar y situarme, pasan los kilómetros y no veo ninguna así que salgo en la primera salida que veo y conduzco hasta una pequeña población cercana, no recuerdo muy bien la hora pero no era muy tarde, entre las 8 o 9 de la noche, las calles estaban vacías y no veía vida por ningún sitio, empecé a pensar si había tomado una buena decisión, sabía de la inseguridad del país debido a su pobreza y yo un blanco con un buen coche podía ser una buena presa para robarle. Voy circulando solo buscando de nuevo el acceso a la autopista cuando veo un pequeño grupo de personas hablando en la puerta de una casa, me acerco a ellos y con los papeles que llevo con el nombre de la ciudad y el lodge les pregunto si voy buen camino, la gente me mira sorprendida y extrañada, pero entienden lo que necesito y me hacen indicaciones de que tengo continuar hacia adelante y que aún me queda bastante distancia hasta mi destino. Ya más tranquilo vuelvo a la autopista y prosigo mi camino, conduzco tranquilo y relajado mi primera experiencia con gente que no está acostumbrada a tratar con turistas ha ido bien.
Llevo un ratito conduciendo cuando veo un panel anunciador, Hermanus, perfecto ya estoy en la localidad, ahora a encontrar mi alojamiento, la población es pequeña y bonita, al menos de noche así me lo parece, conduzco muy lentamente fijándome en todos los letreros buscando uno que ponga el nombre que me interesa, tengo suerte y lo localizo con más facilidad de lo que me esperaba, perfecto.
El edificio es una casa tipo chalet muy grande y parquing interior, está rodeada de un muro alto y se accede al interior por un portalón que se abre cuando toco el timbre.
El interior de la casa tiene un ambiente muy familiar y acogedor, me recibe una mujer mayor y muy amable, me enseña mi habitación y el comedor y salón de lectura para uso comunitario, me encanta y me entra una gran relajación y sosiego.
La cena es familiar, solo somos 8 o 9 huéspedes y tengo varios platos para elegir, el ambiente es muy agradable.
Mi habitación es muy grande, como un dúplex, puedo dormir abajo o arriba, me parece enorme para mí solo.
11-08-2015 - martes
Desayuno y me informo a través de la propietaria del lodge de las posibilidades de realizar alguna salida marítima para ver Ballenas, la excursión para avistar Tiburones Blancos la contrate previamente por internet meses antes en una empresa ubicada en Gansbaai, localidad muy cercana a Hermanus, muy conocida por la gran cantidad de agencias especialistas en salidas marítimas, me indica que las opciones son nulas, estamos en invierno y las condiciones meteorológicas y el estado del Océano Atlántico no son buenas.
En el salón dispongo de folletos y mapas de la zona que estoy, yo ya tengo pensadas varias opciones a realizar y ahora que dispongo de mapas físicos, nada de internet y Google tengo las cosas más claras.
Mi primera visita será el parque nacional de Agulhas, donde se encuentra el cabo Agulhas y un bonito faro, la distancia aproximada desde donde me encuentro es de unos 110 km.
La carretera es muy tranquila y esta jalonada de fincas con animales y sobre todo de bodegas dedicadas a la producción de vino, son visitables y aparte de verlas y degustar sus vinos puedes realizar compras.
Explico brevemente la historia de la implantación de viñedos en Sudáfrica.
Todas las variedades de uva cultivadas en el país fueron importadas de Europa, la historia del vino se remonta a la etapa colonial, cuando en el siglo XVII, el neerlandés Jan Van Riebeeck, creo la base de avituallamiento de la Compañía de Indias en el cabo de Buena Esperanza.
En el país hay cerca de 200.000 hectáreas de viñedo, tiene zonas montañosas donde las vides reciben un invierno frio y lluvioso, así como un verano caluroso, la cercanía del mar con sus brisas suavizan las condiciones extremas.
Actualmente es el octavo productor de vino del mundo.
Prosigo mi relato, mi idea no es visitar bodegas, no soy un consumidor habitual de vino y prefiero dedicar mi escaso tiempo en la zona a conocer sus lugares más emblemáticos.
El cabo Agulhas es uno de ellos, como he explicado al inicio es el punto más meridional de África y punto de unión entre dos importantes Océanos, no tengo problemas para encontrarlo, está bien indicado y el faro se ve a cierta distancia.
la zona está casi desierta, apartada de la población más cercana la atmósfera que se respira es de estar en un espacio especial y diferente. Visito el faro, hay que pagar entrada, pero no he llegado tan lejos para ahorrarme ahora algún Euro.
Al final del camino hay un pequeño monumento que indica la importancia del espacio y una señal que indica el punto imaginario de la fusión de los Océanos Atlántico e Indico, estoy solo en el lugar así que me apaño como puedo para fijar mi cámara y hacerme una fotografía de mi paso por aquí.
Después de comer en un tranquilo restaurante de la carretera me dirijo a Betty’s Bay una localidad costera donde se encuentra ubicada una colonia de Pingüinos Africanos, el acceso a las rocas para poder ver de cerca los Pingüinos se hace por un sendero bien indicado, la zona está delimitada por cuerdas y tiene diversas pasarelas de madera para facilitar su visión, paso un par de horas disfrutando de los curiosos y peculiares movimiento de los animales y regreso a Hermanus antes de que anochezca.
12-08-2015 - miércoles
Hoy lo voy a dedicar a visitar Gansbaai y acercarme a Great White Shark Tours, empresa con la tengo contratada la salida para encontrar Tiburones Blancos. Los contactos hasta ahora han sido vía mail y sin concretar el día exacto.
No han respuesto a mis últimos correos y solo me queda un día en la zona antes de desplazarme a Ciudad del Cabo.
Cuando llego al parking de la agencia lo veo vacío y sin movimiento de gente en el local, me asaltan malos presagios y presiento que me voy a ir de Sudáfrica sin ver los tiburones. me atiende una mujer muy amable, nos cuesta entendernos ya que no se inglés, la mujer comunica que llevan varios días con el Océano muy agitado y que los barcos no pueden salir, le hago saber que mañana por la tarde me iré, me mira con preocupación y se va a su ordenador a buscar algo, me dice que me acerque y me enseña en la pantalla un mapa muy detallado con la altura de las olas y otros detalles meteorológicos, veo que busca la previsión de varios días y me comunica que si no recibo ningún mail el día 15 que es sábado venga ya que hay muchas posibilidades de salir a altamar.
La opción trastoca todos mis planes, en esas fechas estaré alojado en Ciudad del Cabo y el día 17 inicio el regreso a Barcelona, acepto y le confirmo que a la hora indicada estaré aquí.
El día esta gris y plomizo, necesito despejarme y dejar de pensar en lo difícil que se está poniendo cumplir mis deseos vacacionales de este año, dejo mi vehículo en el parquing de la agencia y salgo a pasear por esta localidad costera.
De regreso a Hermanus voy haciendo planes mentalmente para poder combinar los días y regresar el día 15 a Gansbaai.
El día sigue gris, pero aún me quedan varias horas de luz y ganas de pasear, Hermanus es una localidad moderna y acogedora con varias esculturas dedicadas a temas marinos enclavadas en un bonito paseo costero, ideal para recorrerlo y sacar algunas imágenes de la ciudad.
Ceno en el lodge y aprovecho que tengo buena conexión a internet para preparar la ruta de Ciudad del Cabo a Gansbaai, sobre el papel no presenta dificultad, son 163 km. y la carretera es buena, Google calcula algo más de dos horas, sin problemas ya que la excursión marítima es sobre las doce del mediodía y hay que estar en la agencia una hora antes.
13-080-2015 - jueves
Abandono Hermanus después del desayuno, he modificado mis planes, de inicio no iré de a Ciudad del Cabo y pasare antes por el Table Mountain National Park para visitar Cape of Good Hope (Cabo de Buena Esperanza).
La visita no me defrauda, es un paraje muy bonito y espectacular. El acceso al parque está regulado y hay que abonar entrada, ya dentro hay varias rutas, yo de inicio me dirijo al Faro, su acceso se hace con un funicular, se deja el vehículo en un parquing y se accede a pie a las instalaciones.
Las vistas desde la ubicación del faro son espectaculares, el sendero se estrecha conforme va finalizando y acaba en un mirador precioso. Una persona me hace varias fotos con mi cámara y me dirijo al aparcamiento desde donde sale un sendero que va bordeando los acantilados, es bastante largo, pero decido hacerlo, no creo que vuelva más aquí y quiero verlo en detalle. No es difícil ya que no tiene grandes desniveles y a lo largo de su recorrido puedo ver varias playas desde arriba.
De regreso abandono el lugar, he visitado la parte elevada del cabo, ahora toca visitar la playa, otro punto muy bonito del parque, una vez allí me relajo viendo como las olas golpean fuertemente los acantilados y después de que me hagan unas fotos recordatorias de mi estancia en el lugar inicio el camino a Ciudad del Cabo, de regreso y aún dentro del parque nacional puedo ver más Pingüinos Africanos.
El hotel contratado en Ciudad del Cabo está a 15 minutos a pie del centro, es una zona residencial tranquila y dispone de aparcamiento propio, no me cuesta encontrarlo, he activado los datos del teléfono, hay buena cobertura y Google me lleva sin complicaciones.
14-08-2015 - viernes
Hoy voy a dedicar el día a visitar la ciudad, ha salido un día gris y tristón, pero no puedo elegir, me adapto y me dirijo a pie desde el hotel al centro de la ciudad y al puerto, por lo que he visto en los folletos que he conseguido en el hotel y la información que conseguí por internet es lo más interesante que hay.
El cielo esta gris y plomizo, las fotografías que hago salen sosas, sin vida. El paseo por la parte antigua de la ciudad me permite visitar el Ayuntamiento, la catedral, el castillo de Good Hope, la Galería Nacional de Sudáfrica y otros sitios emblemáticos de Ciudad del Cabo, la arquitectura es una mezcla de edificios clásicos mezclados con otros de líneas mucho más modernas, donde predomina el cemento y el cristal.
Mediodía, hora de comer, me voy a Waterfront, traducido Frente al mar, la zona es atractiva con muchos espacios dedicados a la restauración, lo que aprovecho para saciar mí hambre y sed.
El descanso de la comida me ha ido bien, visito el monumento Nobel Square con esculturas de Nelson Mandela, Albert Luthuli, Desmont Tutu y FW de Klerk, artífices del fin del aparheid y regreso al hotel antes de que oscurezca ya que la zona está muy despoblada y no quiero tener ningún problema.
15-08-2015 - sábado
me levanto pronto, desayuno y me voy a Gansbaai, quiero llegar con margen suficiente por si sale algún problema en el trayecto, ayer tarde estuve pendiente del correo electrónico y no recibí ninguno anulando la cita de hoy, si no hay problemas en unas horas me embarcare a la captura fotográfica del gran Tiburón Blanco.
Llego sobre las diez a la ciudad costera, no tiene nada destacable, excepto un faro, que ya visité en mi anterior visita a la ciudad.
La recepción de la agencia está llena de gente variada, tanto de nacionalidad como de edad. Tienen preparado un pequeño buffet con comida y bebida, la mayoría están picando, yo no tengo mucha hambre y no tengo claro que comer pueda ser bueno para navegar con el océano movido, finalmente decido picar algo pensando que si la salida es a las doce y vamos a estar varias horas fuera lo necesite.
Salimos con puntualidad, el barco dispone de varios motores fuera borda de gran potencia y eso se nota al instante, ya que navega a gran velocidad. No recuerdo el tiempo que ha durado la travesía, pero a la velocidad que íbamos nos hemos alejado mucho de la costa. Llegamos a un punto donde hay otras embarcaciones similares a la nuestra y nos detenemos, un integrante de la tripulación empieza a preparar un “cóctel” en un gran bidón de 200 litros, coge agua del Océano con un cubo y la introduce en el recipiente mezclándola con enormes trozos de pescado, no sé qué especie es, pero el mejunje tiene un color sangre muy evidente, la mezcla producida la arroja al agua, la intención esta clara, atraer los Tiburones hacía nosotros. Mientras el cebo hace su efecto van preparando una jaula de grandes dimensiones que llevamos y la sumergen en un lateral del barco, ya tenemos preparado el escenario, ahora solo faltaba que vengan los actores especiales.
El Océano está agitado, el barco parado está a merced del oleaje, el vaivén es fuerte y se nota mucho, veo a los otros barcos aparecer y desaparecer entre las olas e impresiona, noto síntomas de mareo que intento contrarrestar mirando un punto fijo en el horizonte.
La espera es breve y no tarda en aparecer un Tiburón Blanco, no es muy grande, pero solo es el principio. El staff del barco comunica por los altavoces que el que quiera sumergirse dentro de la jaula se ponga los trajes de neopreno que llevan, no lo dudo he viajado hasta aquí y ahora no voy a dudar, el agua está muy fría, pero no me importa.
Ponerme el traje no es fácil y el vaivén de la embarcación no ayuda nada, empiezo a notar náuseas y decido hacerlo muy lentamente levantando continuamente la cabeza y mirando a un horizonte imaginario. Van viniendo escualos más o menos grandes, un marinero se encarga de atraerlos a la jaula, tiene como cebo un palo largo con una gruesa cuerda y un gran trozo de carne sujeto a ella. lo lanza lejos y cuando el Tiburón intenta atraparlo lo recoge rápidamente para atraerlos a nosotros. El sistema funciona bien, hago varias fotos y decido sumergirme, no podré fotografiarlos bajo el agua ya que no dispongo del material fotográfico adecuado, pero quiero verlos de cerca.
la jaula es grande, se accede al interior por la parte superior y tiene una tapa de barrotes que abren y cierran cuando no hay peligro, su capacidad es para cinco o seis personas en línea y dispone de un espacio pequeño libre de barrotes que posibilita poderlos ver bien, eso si la abertura no permite que los Tiburones nos toquen.
El agua esta helada, pero la excitación del momento es tan importante que no me influye, el sistema es sencillo, solo llevo el traje y su capucha, para respirar tengo que sacar la cabeza fuera del agua y cuando se acerca uno me sumerjo y los veo moverse alrededor de la jaula intentando pescar el cebo que le ponen.
Antes de salir tengo suerte, un gran ejemplar se acerca y golpea violentamente los hierros con las fauces completamente abiertas, difícil describir el momento, tener su enorme boca abierta con sus grandes colmillos en primer plano a un metro escaso mío es fantástico, decido salir, quiero poder verlo desde el exterior y hacerle alguna foto.
No intento secarme, voy rápidamente a coger mi cámara, la tengo en uno de los cajones habilitados debajo los asientos, el Tiburón esta todavía merodeando alrededor nuestro, casi sin tiempo de preparar el objetivo lo veo acercarse
velozmente al barco sacando la cabeza fuera del agua y con las fauces entreabiertas, solo puedo hacer una foto decente, pero me compensa todas las vicisitudes vividas hasta este momento.
Pasado el momento empiezo a quitarme el traje de neopreno y ese es el momento durillo de la excursión marítima, el esfuerzo realizado para despegar el neopreno de mi cuerpo y tener la cabeza agachada me provoca fuertes náuseas y un gran deseo de expulsar todo lo que había ingerido desde el desayuno, no lo dudo, cojo una de las bolsas de papel dispuestas por todo el barco y la lleno.
No soy el único mareado, creo que a lo largo de la mañana la mayor parte del pasaje ha hecho uso de las bolsitas, lo atestigua un gran bidón de plástico repleto de ellas.
Tras descansar un rato y reponerme sigo con mi afición fotográfica, esperaba algo más de espectáculo y que alguno de nuestros visitantes hiciera algún movimiento espectacular, pero no es así, la tripulación solo se preocupa de acercarlos a la jaula, en ningún momento levanta el cebo lo suficiente alto para ver si alguno hacia algo especial y diferente.
El regreso es rápido y sin problemas, durante el trayecto nos comunican que toda la excursión ha sido grabada en video y si nos esperamos una hora en su local la podremos adquirir a un precio razonable.
No tengo prisa ni planes para el resto de la jornada, decido dar una vuelta por la localidad y antes de irme paso por la recepción de la agencia para comprar el DVD de la excursión.
De regreso a Ciudad del Cabo, vivo un incidente grave. pero sin consecuencias para mí, voy circulando por una carretera que tiene una suave pendiente con curvas cuando de repente veo descender a gran velocidad un camión, solo me da tiempo a ver su parte trasera antes de dar un golpe rápido de volante y esquivarlo. Mi primera intención es parar, imposible, no hay arcén y solo vuelvo a ver el camión un instante por el retrovisor antes de llegar a la siguiente curva.
16-08-2015 - domingo
Último día para visitas y ver algo interesante antes de finalizar mis vacaciones en Sudáfrica. El día está despejado y luce un espléndido Sol, perfecto, desde que abandone la zona del parque nacional Kruger el buen tiempo no me ha acompañado, decido subir a unas montañas que pertenecen al Table Mountain National Park y desde las que se tiene una espectacular visión de Ciudad del Cabo, el acceso es con teleférico, ya una vez arriba hay varios senderos para visitar diferentes espacios del parque, paso la mañana paseando y tomando fotografías de lo más interesante, pido a un visitante que me haga una fotografía para tener un recuerdo y regreso a la ciudad.
Aparcar por el centro de la ciudad es imposible, es domingo y está colapsado de vehículos y gente paseando.
Decido comer otra vez en la zona portuaria y visito el Nelson Mandela Gateway, pequeño edificio con una exposición de la vida de Nelson Mandela y como indica la palabra gateway (en castellano puerta de acceso), es aquí donde se adquieren los billetes del barco que va a la isla de Robben para visitar el presidio que ocupo por muchos años el líder sudafricano.
No me había enterado de que se podía visitar la prisión y a la hora que he llegado ya no hay plazas disponibles en los barcos que van, lástima me hubiera gustado visitar un lugar tan emblemático.
Paseo por el entorno y hago algunas fotografías a los antiguos edificios portuarios restaurados, sigue luciendo un Sol espléndido y hay que aprovecharlo.
El final de la tarde la dedico a pasear por el litoral y regreso al hotel para preparar el retorno.
Si tuviera que puntuar las vacaciones de este año sería un notable, he conseguido mi principal objetivo, el Tiburón Blanco, no he visto Ballenas, pero como ya he disfrutado de ellas en Argentina, Canadá y otros países no me importa tanto, respecto a la fauna terrestre las Leonas, Rinocerontes Blancos y Elefantes ha sido lo mejor, me queda la espinita de no ver Leopardos y Guepardos, pero son felinos que ya he visto en viajes anteriores al continente africano